La hermandad del Carmen de San Cayetano realizó el pasado martes 13 de octubre, una salida extraordinaria de su titular, Santa Teresa de Jesús, con motivo del V centenario del nacimiento de la fundadora abulense. El cortejo partió desde la iglesia de San José y Espíritu Santo, donde se celebró momentos antes de la salida el primer día de triduo, hasta las Madres Carmelitas Descalzas del convento de Santa Ana. El acompañamiento musical corrió a cargo de la Banda de Música de Ntra. Señora de la Estrella de Córdoba.
El cielo de Córdoba tomaba un gesto amenazador desde primera hora de la mañana, y los partes meteorológicos no eran nada esperanzadores. Sin embargo, la cruz guía de la comitiva carmelita salió puntualmente de la Parroquia del Campo de la Verdad, a las 20:00 de la tarde.
Para esta ocasión tan especial, la junta de gobierno y el equipo de priostía de la hermandad decidieron que Santa Teresa saliera a la calle con una capa de camarín bordada de la Virgen del Carmen Coronada, donada por el taller de bordado de la Archicofradía en el primer aniversario de su Coronación Canónica.
Avda. de la Diputación, Puente Romano, Torrijos, Deanes y Blanco Belmonte, son algunas de las calles por las que discurrió el cortejo de San Cayetano, que contó con alumnos del Colegio Virgen del Carmen, que no podían faltar a la salida de su fundadora. “Santa Teresa de Jesús” de Beigbeder, en la salida y en la entrada, “Corpus Christi” en el Puente Romano, “Triunfal” en el Arco del Triunfo o “Saeta Cordobesa” del maestro Gámez en la plaza de Santa Ana, fueron algunas de las interpretaciones durante el recorrido por la Banda de la Estrella.
También tiene mérito nombrar a los costaleros que llevaron a la Doctora de la Iglesia por las calles cordobesas. La Archicofradía del Carmen de San Cayetano es de las pocas que conserva una cuadrilla de costaleros y costaleras, que tanto en mayo, con el Milagroso Niño Jesús de Praga, y en julio, en el paso de Santa Teresa de Jesús, procesionan llevando a los sagrados titulares sobre sus costales.
Hace 440 años, Santa Teresa de Jesús cruzaba el Puente Romano. Ni la inquisición, que residía en la Torre de la Calahorra, ni la anchura del Puente, pudieron acabar con sus aspiraciones religiosas. El pasado martes parecía que el puente seguía siendo estrecho, ya que los cofrades cordobeses lo abarrotaron para disfrutar del tránsito de la cofradía carmelita, teniendo como testigos a San Rafael arcángel y la Catedral de Córdoba.
Texto de N.H.D. Antonio Cárdenas Jódar
Fotografías de N.H.D. Miguel Arroyo García.